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Mi historia con Devi comenzó mucho antes de conocerla en persona. Ya seguí su ministerio a través de la Iglesia Bautista Lagoinha, donde fui miembro mientras vivía en Brasil. Sin embargo, la primera promesa hecha por Dios para mi familia fue dada a través de la vida de Devi, en una conferencia de Delante del Trono a la que asistí en línea, ya que ya me había mudado a los Estados Unidos. Incluso a través de las pantallas, tomé posesión de esta Palabra:
Su posteridad será conocida entre las naciones, sus descendientes entre los pueblos; todos los que los vean los reconocerán como la bendita familia del Señor. - Isaías 61:9
Es asombroso cómo Dios conecta a las personas para cumplir Sus sueños. Cuando escuché este mensaje en 2015, no estaba pensando en venir a vivir a Portugal, y mucho menos en convertirme en un pionero en la implementación del proyecto misionero Experiencia del Hogar en esta nación. Y cada vez que escucho el mensaje que ella entregó en esa conferencia, me doy cuenta de que todo ya estaba allí, simplemente no podía verlo todavía.
Portugal ya era un sueño que Dios había puesto en el corazón de Devi. Por eso estaba tan feliz cuando le dije que me mudaba aquí. Recuerdo este día como si fuera hoy, su rostro se iluminó y se llenó de alegría por la noticia. Así que pensé, al menos hay alguien feliz de que me mude a Portugal, ¡y esa fue Devi!
Y a través de otra conexión preparada por Dios, el 10 de marzo de 2016, estaba en el auto, yendo a mi clase de inglés, cuando un querido amigo me llamó y me dijo:
"Bruna, ¿recuerdas el trabajo voluntario del que te hablé? Entonces, vamos a tener una reunión la próxima semana y es con Devi Titus, no sé si ya sabes sobre su ministerio..."
El mundo se detuvo, y en ese momento, creo que me congelé por unos segundos. Ni siquiera sabía que Devi vivía en esa área, y mucho menos que algún día la conocería en persona. ¿Te imaginas servir en este ministerio impactante dentro de su hogar? ¡Otra vez, Dios! ¡Solo él!
La primera vez que estuve en la casa de Devi, creo que mis pies aún no habían llegado al suelo. Devi era una mujer muy especial, una mujer bendecida que bendecía a otras mujeres. Ella nos inspiró a practicar la paz y el amor dentro de nuestro hogar sin tener que decir una palabra. Observarla, ya era una gran lección, ya que enseñaba con el ejemplo, a través de sus actitudes.
Sin embargo, no tengo ninguna duda de que Dios mismo me equipó para ese momento, cuando era voluntario en el Hogar Titus. Él fue quien me permitió convertirme en mentora de Experiencia del Hogar en Portugal, y también es Él quien continúa permitiéndome continuar este legado con Trina ahora.
Pude tener la verdadera experiencia en el hogar y fue un privilegio servir junto a Devi durante casi tres años. ¡Una mujer increíble que construyó un legado que marcó generaciones e impactó miles de vidas en todo el mundo, incluida la mía!
Seguramente su humildad y su corazón enseñable fueron lo que la hizo brillar más. ¡El detrás de escena de Experiencia del Hogar fue la mejor parte! Lavar los platos junto a ella, organizar la despensa, el garaje o limpiar el cajón de los paños siempre fue una oportunidad para aprender de sus historias y experiencias compartidas a través de conversaciones agradables.
La extrañaremos, pero estoy lista para seguir el viaje de la Experiencia del Hogar con Trina y tantas personas increíbles en todo el mundo que son parte de esta "gran familia", ¡porque conozco a Aquel que me llamó!
Confiando en esto, que el que comenzó una buena obra en ti la llevará a cabo hasta el día de Cristo Jesús. - Filipenses 1:6 NVI
Por Bruna Duarte
Lisboa/Portugal
Bruna Duarte
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