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Mi nombre es Márcia Lombardi, soy natural de Belo Horizonte, Minas Gerais/Brasil y vivo hace veinticuatro años en Dallas, Texas, Estados Unidos.

En enero de 2011, después de ser invitada por una amiga a acompañarla en la Conferencia de Pastoras y Mujeres de Pastores, conocí a Devi Titus y al Ministerio Kingdom Global,  donde ella ministraba todos los años.

En esa ocasión, yo ya había oído la predicación de la "Experiencia de la mesa" a través de otra querida pastora, que también conocía las predicaciones de la Devi en el CFNI y llevó a la Iglesia Brasileña en Lewisville ese principio. Fue una sorpresa maravillosa conocer a la autora de la predicación, pues ya había sido impactada por su mensaje.

Desde entonces, tuve el honor de participar en los primeros Congresos de Mujeres delante del Trono en la iglesia bautista Lagoinha, donde Devi predicó en 2011-2012.

A finales de 2015 recibí la invitación para participar como voluntaria en "Titus Home" en un programa Intensivo, en el cual, Devi recibía mujeres brasileñas y de otros de varios lugares de los Estados Unidos e incluso de otros países. He estado sirviendo este ministerio desde el primer intensivo al último. Resalto que servir en "Titus Home" fue una experiencia de humildad para mí. Fue sirviendo, que vi al Señor tratar mi corazón y también de muchas mujeres que pasaron por el Intensivo, todas entregándose con amor, sin ninguna pretensión. El grupo de voluntarias estaba formado por personas extraordinarias y que de modo igual, servían a los participantes, facilitando todo el trabajo de Devi y Trina, desde lavar los cubiertos, preparar alimentos hasta arreglar las habitaciones. Era una alegría para mí, pues incluso sin ver, ya sabía que estaba colaborando  para algo grandioso que impactaría a las familias brasileñas y del todo el mundo.

Todo fluía bien e incluso si algo pudiera salir "mal" nunca presencié a Devi quejándose o aún estresarse con lo que no funcionó. Cuando algo se rompía (yo ya lo había roto) ella nos miraba y decía que aquello era sólo una "cosa" y que siempre había otra para reemplazar.

Éramos voluntarias, pero teníamos también la oportunidad de asentarnos con aquellas mujeres y aprender las profundas enseñanzas de la "Experiencia del Hogar".

Me identifiqué desde el principio con Trina Lozano Titus, ella es una persona súper agradable, divertida, llena de la sabiduría de Dios, y muy seria con la obra del Señor. Su testimonio me impactó y su vida y familia me inspiran.

Esa experiencia me enseñó que servir es una de las formas más nobles de amar y valorar a aquellos a quienes Dios ama, y por eso, mi respuesta será siempre " aquí estoy!".

¡Estoy muy feliz y esperando que el Señor  haga a través de la Trina y de todas las mujeres  mentoras de la Experiencia del Hogar Global! ¡Lo mejor está por venir!

Por Márcia Lombardi
Dallas/Texas-Estados Unidos


Si quieres compartir tu testimonio, ¡ponte en contacto con nosotros! Será un honor compartir con el mundo lo que Dios ha hecho en tu vida a través de la Experiencia Hogar.

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